Tanto en la caja como en los contactos hay un grupo de fotografías que fueron tomadas posterior al fallecimiento del abuelo. Estas son imágenes de las décadas de los 50 y principios de los 60, que posiblemente fueron tomadas por Carlos Ignacio, quien era aficionado a la fotografía y tenía un cuarto oscuro en su casa, donde posiblemente también hizo copias de los contactos.